EsCKrituras: diciembre 2016

07 diciembre 2016

Cuento de despedida del jardín infantil


Había una vez, un ángel en el cielo, estaba jugando con otro ángel a la pinta. Eran los mejores amigos, siempre jugaban juntos. Estaban en un parque donde había muchos otros ángeles.
-¿Cuándo iré con mi mamá y papá? -preguntó uno de ellos a otro ángel grande que pasaba por ahí.
-Ya está todo listo, mañana conocerás a tu familia-Le contestó.
-¿Qué es una familia?
-Familia son unas personas que están juntas y se quieren mucho.
-¿Y a mi también me van a querer?
-¡Claro! ¡Si te están esperando!
-¡Yupi! ¿Y cómo sé quienes son?
-Los reconocerás porque tu mamá es la más bella del mundo, y tu papá es el más fuerte de todos.
Esa noche, al ángel le cuesta quedarse dormido de tanto nervio que tiene, pensando en lo que pasará al día siguiente.
Cuando despierta al otro día y abre los ojos, se encuentra con una mujer que lo tiene en brazos, lo mira con mucho amor. El ángel la mira fijamente a los ojos, y reconoce.
-¡Mamá!
La mamá mira este ángel, que se ha convertido en un bello bebé recién nacido, le da un tremendo besote en su carita.
Luego, el bebé mira al lado y ve un hombre. El hombre sonríe cuando el bebé lo ve.
-¡Papá!
Y el papá toma al bebé y le da un tremendo abrazo muy apretado.
El ángel se ha convertido en bebé y ahora está con su familia.
El bebé crece, aprende primero a sentarse y después a caminar. A veces se cae pero no importa. ¡Caminar es divertido!
También aprende a hablar, conoce muchas palabras nuevas, y las va diciendo a todas las personas que conoce.
Un día, mamá y papá le cuentan al niño que lo van a llevar a un lugar entretenido, se llama “Jardín”.
-¿Qué es un jardín?
-Un jardín es un lugar donde puedes aprender y ver cosas nuevas, y hay otros niños para jugar.
-¿No me va a pasar nada? -Le pregunta el niño a papá y mamá.
-Claro que no, en el jardín se pasa bien y hay cosas divertidas.
Al otro día lo llevan al jardín. Es un lugar de muchos colores, y hay muchos niños.
Cuando entra en la sala ve muchos juguetes, es un jardín grande pero tiene mesas y sillas pequeñas para poder sentarse cómodamente.
En el jardín hay muchas tías, hay tías que están en la puerta del jardín, saludando a todos los niños que llegan, otras que están en la cocina preparando las ricas colaciones, otras que dejan todo limpio para poder tirarse a jugar al suelo, y están las tías que juegan y le enseñan cosas en la sala.
Al niño le gusta el jardín.
Un día, estaba en el jardín aprendiendo palabras en inglés con la miss, y de repente se abre la puerta, entra una señora adulta que lleva de la mano una niña muy linda que tiene cara de pena.
La niña mira a todos lados, no quiere entrar porque no conoce a esos niños. Le da susto y no quiere que la mamá se vaya.
El niño la mira un momento y luego la reconoce.
¡Es la amiga ángel con que estaba jugando a la pinta!
La niña empieza a mirar a todos lados y de repente lo ve, se le quita la pena, el susto y se empieza a reír.
¡Amigo!
La niña entra y empiezan a jugar juntos. Luego se hace amiga de los otros niños que están en la sala.
Pasa mucho tiempo, van al jardín casi todos los días, aprenden inglés, los planetas, los días de la semana, hacen yoga, conocen los mapuches y rapa nui, hacen karate, bailan, dibujan letras y números, hacen muchas actividades con las tías, y aprenden juegos muy divertidos.
El niño crece, ya es un poco más grande.
La mamá le dice:
-El otro año vas a ir a un lugar que se llama “colegio”. Es como un jardín, pero más grande.
-¿Y me va a gustar? -Pregunta el niño.
-Yo creo que sí, va a haber muchos niños, con más tías, y ¡vas a aprender cosas de niños grandes!
-¡Yupi! ¡Me gusta aprender cosas de niños grandes!
Entonces, en el jardín, hacen una fiesta de despedida para todos los niños que comenzarán a ir a un nuevo colegio, con jugos y pancitos y otras cosas ricas para comer.
Pero los adultos también crecen un poco, aunque se nota menos porque ya son grandes. Y los adultos a veces también se tienen que ir. Uno de esos adultos es una de las tías del jardín, que tiene que viajar a un lugar muy lejos con su familia. Ella también es un ángel que hace mucho tiempo se transformó en tía para acompañar y jugar con los niños.
Después de llenarse la panza en la fiesta se van todos a sus casas, esperando que llegue el día en que conocerán el nuevo colegio.